jueves, 15 de diciembre de 2011

PIEL DE BARRO

Resumen.
Cuando de niña jugaba con el barro y elaboraba pequeñas vasijas y figuras como parte de mi diversión, no pensaba aún en la posibilidad de hacer de él la materia prima de mis esculturas. Poco a poco fui madurando la idea de trabajar con este material que encierra tanto significado, conjugando entre mis manos los cuatro elementos que ahora ya son parte de mi obra.
La tierra, que es el origen, arrancarla del suelo para hacer de ella una pasta moldeable y frágil a las manos del artista. El agua, elemento vital e indispensable, que se funde entre los poros de la tierra para darle la consistencia adecuada; esta tierra empapada con agua es la mezcla perfecta que se desliza entre las manos del hombre para adquirir formas y colores. El aire, que descansa entre las formas, que son como ráfagas de vida que las recorre y acaricia, permitiendo ese contacto entre el artista y el espectador. Y el fuego que calienta, atrapa y funde el barro, dotándole de resistencia y fuerza que lo mantiene y lo libera. Son estos cuatro elementos indispensables para vivir, y así como Dios hizo del barro al hombre y le dio un soplo de vida, el artista crea sus obras con el mismo amor y convicción.
Muchas veces me senté frente al escenario de mi vida, me vi reflejada en la tristeza, la soledad, temores y complejos; pero también la felicidad, sentimientos que marcaron mi vida y dejaron huellas, muchas de ellas imborrables.
Pero ha sido el arte que me ha proporcionado esas herramientas; manchas, dibujos, colores, luces y sombras pero lo más importante “el barro”, modelador de mis ideas. Una carrera llena de grandes satisfacciones y experiencias que enriquecieron mi espíritu y que me llenaron de nuevas ideas, que hoy pretendo llevarlas a la investigación.
En mi interminable búsqueda por encontrar el camino, experimente por diferentes estilos y corrientes que me sirvieron para de una manera indirecta encaminarme por la nueva figuración, y el conocer la obra de muchos artistas, tanto locales como internacionales y en los que me he visto identificada, tanto por la técnica y la temática especialmente por el tratamiento de la figura humana, me ha servido de referencia y me ha dado los lineamientos para poder iniciar mi estudio en la escultura neofigurativa.
Una vez expuesto paso a paso lo que he realizado y pretendo alcanzar, mi interés ahora es encontrar el camino correcto. Estoy segura de que el arte es mi vida y que trabajar con la figura humana me lleva a otro mundo, tengo en la mente muchas cosas que deseo realizar; sirve en este momento el propósito de un trabajo constante y esforzado.
…….mi futuro “modelar mis ideas con el barro”.

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